El filme comienza con una escena que recuerda la mítica secuencia inicial de Fellini 8½, dirigida por Federico F. Un atasco automovilístico en la calurosa Los Ángeles de principios de los 90 resulta casi idéntico, pero desprovisto del surrealismo italiano. Ante el clima asfixiante, al igual que Meursault en El extranjero de Camus, William Foster …










