Recibimos un testimonio que dada su calidad narrativa y su probada autenticidad reproducimos a continuación… Estábamos celebrando que todo había salido bien, cuando de pronto, tres, dos, uno, de regreso al Hospital por un dolor insoportable, pero para nada desconocido. La vesícula otra vez. Hay algo perverso en confesar que mientras iba en el carro, …
