Hermosillo, Sonora.-
Recién se cumplieron tres años de la muerte de Sergio Rascón, el más grande artista plástico que ha parido este desierto (Caborca 1962, – lugar desconocido 2021), y el más nefasto también (inolvidables numeritos por aquí y por allá, solapado por la comunidad culturera, valga agregar). Con ese motivo, los camaradas de SHILO (emergente iniciativa contracultural, como se anuncian), invitan a conocer su obra en un marco inmejorable: la vieja Casa del Emilio, hoy convertidas en centro cultural gracias al afán y visión de dos promotores culturales que rehuyen de las cámaras. Con motivo de esta exhibición homenaje, hicimos una breve entrevista a uno de los meramentes de SHILO.
CRÓNICA SONORA.- ¿De qué va la expo de Rascon? ¿Qué la distingue de otras?
DANIEL GARCÍA.- Se trata de obras que no se han exhibido anteriormente en museos o galerías oficiales, y un momento para recordar a nuestro amigo Sergio con motivo de su tercer aniversario luctuoso. Tendremos la proyección de un documental realizado por Sergio Zaragoza, además de la Expo Venta de piezas en papel, lona, madera y lámina de las colecciones de L.R. Casas y L. López
CRÓNICA SONORA.- Eso supone una cantidad ingente de vino de honor, ¿es asi?
DANIEL GARCÍA.- Ofreceremos café y tamales para compartir anécdotas a modo de velorio, dado que Rascón no tuvo servicios funerarios por pandemia.
CRÓNICA SONORA.- Por ultimo, ¿hasta cuando se puede visitar la expo y en que horario y dias?
DANIEL GARCÍA.- Pueden hacer cita en nuestro Instagram, X o Facebook @shiloartesonora para programar visita y poder mostrarles el catálogo de obra disponible.
La apertura de la exhibición será esta tarde de viernes nublado, en punto de las diecinueve horas. Allá nos vemos.
Por Benjamín Alonso Rascón
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Poema cínico canino con frases rasconianas
En vida aspiramos a la fama y riquezas buscamos asentar un renombre, pero ante la muerte, ¿de qué sirve lo que comes?
todos terminamos donde mismo
sin importar qué tan gordos o flacos estemos.
Me pregunto, ¿Por qué no vivir en la simpleza? como la de los perros que merodean aquí y allá
Ninguna necesidad de fortuna o casas elegantes. Ya que al morir todo queda desparramado y cada quien por su lado.
Mientras yace nuestro cuerpo inerte sin vida aparente nos azota el miedo al sentir que ya nos llega la hora. ¡¡¡Ay qué miedo!!! ¿Cuál ha sido el legado que he de dejar? ¿la memoria de un personaje egoísta o una vida bien vivida? El ego humano rasgando el infinito para perpetuar el adn.
Y mientras damos la última bocanada de aire puede que nos demos cuenta que aquellos que realmente vivieron son aquellos que han dejado una marca a su paso.
Ya que en la muerte no son las posesiones lo que hemos de llevarnos sino las memorias que dejamos, esas viven para siempre.
L.R. Casas