Nuestro corresponsal de guerra rocanrolera entrevistó a Catana, que algo sabe de música y de estas agrestes tierras

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Hermosillo, Sonora.-

Rafael Catana es de esos músicos que llevan un montón de años (desde 1969) haciendo canciones dignas de meterse a una botella para que lleguen a miles de gentes que habitan islas desiertas o ciudades enteras. Aun cuando se mueve en la periferia de la creación, no se debe tomar a la ligera el trabajo y la producción del Catana. Se extinguió del planeta el material con el que hicieron a este jarochilango de raíces africanas.

Sólo de escucharlo hablar y –por supuesto- sus rolas, sabe uno que el Racatana encontró una fórmula para que se escuche de adeveras –nada forzado, pues- cuando nos suelta una rola con guiños de son jarocho, de polka anorteñada (¡ay, carbonera!), rocanrol o cualquier sonido o rasgada de guitarra del universo del folk.

Se dejó entrevistar para Crónica Sonora porque sabemos que le emociona venir a cantarnos y decirnos su sentir.

OG.- Catana, has venido ya más de un par de veces a Sonora. Tocarás en el FAOT (Festival Alfonso Ortiz Tirado) el 25 de enero. ¿Tiene algún significado para ti darte el rol por acá, por el desierto? Hemos reconocido algunos guiños en los que nos hablas de lugares de por acá en tal vez un par de rolas tuyas.

RC.- Yo tengo a Sonora en el corazón, que es otra historia que luego te contaré. Para mí es la cuarta vez que estoy en Sonora. Fui a tocar al festival Trova y Poesía de la Universidad de Sonora en 2014. En Punta Chueca el 2022.

Sucede que estar en este maravilloso festival en Álamos para mí es un regalo de la vida, es una bendición porque mi relación con Sonora en muy fuerte. Muy fuerte a pesar de la distancia y de sucesos que luego la vida no nos deja estar cerca… Y estar en Sonora es el paisaje, es la gente, es la vibra, es el amor. 

El desierto de Sonora alimenta mi espíritu, mi alma. El cielo de allá me ha determinado… Les voy a mandar pronto una canción que tiene que ver con esto.

OG.- Traes disco nuevo bajo el brazo: “Ruido en el Corazón”. Háblanos un poco de él. ¿A qué Catana vamos a escuchar en este nuevo disco?

RC.- Estoy montando este nuevo disco. El concierto que habrá el 25 de este enero, allá en Álamos, sería la mitad del disco Terregal y gran parte del Ruido en el Corazón. Es un disco que lo hice en la pandemia entre 2021-2022. Como estábamos encerrados lo hice en línea con varios productores, con Óscar Fuentes (que está en Tucson); y así mismo con muchos músicos como Mauricio de Cabezas de Cera, los hermanos Adolfo y Erick Romero del grupo La Barranca. 

Es un disco muy complejo. Tocaré varias canciones acústicas y otras más con la banda. Además, llevaré un repertorio de todos estos años de vida.

OG.- Háblanos de escenarios, Catana. Tú que tocas en el Alicia, en foros periféricos en Chiapas o en Tijuana. En Bellas Artes o en universidades… Y ahora en el FAOT…

RC.- Yo toco en todos los escenarios del país. Recuerdo cuando nos conocimos en Chiapas tú y yo en aquel festival rolero que organizaron con Poncho Yerbas. Después toco en Guadalajara, en Toluca, Aguascalientes. En esta carrera he tocado en todas partes. Entonces el paisaje mexicano ha nutrido todas mis canciones: el trópico, el desierto, Oaxaca, Punta Chueca y toda su luz, qué se yo.

Y lo anterior es una bendición porque hago canciones que tienen que ver con hombres y mujeres de México, con las estrellas que nos cobijan cuando tocamos.

OG.- Eres Rupestre y viste irse y regresar al acetato… ¿Cómo te la estás llevando con esta nueva forma de presentar la música? Ya sabes, eso de las plataformas o la inmediatez del YouTube.

RC.- Bueno, lo Rupestre tiene que ver con lo acústico y yo sigo tocando la guitarra acústica. Aunque con esta alineación -con la que iremos allá- está tocando Miguel Gallo Esparza, que es un roquero de cepa. Él ya ha tocado en Álamos, tocó con los Dugs Dugs algunos años, por ejemplo…

Por lo otro, pues de pronto las plataformas son ahora las herramientas que nos acercan más: como cuando te interesa o te gusta un artista está más inmediato el encuentro a través de ellas. Nos acercamos a todo un mar de música con las plataformas. 

Ruido en el Corazón aún no está en las plataformas (en Spotify o en YouTube). Aprovecho para anunciar aquí que estará disponible en plataformas en febrero, pero Polvo de Ángel, Terregal, Caballo y la Rabia de los Locos sí están. Y próximamente subiré Nahual, que es un disco que hice en 1997.

Y pues sí, como dices: he sacado cassetes, Cd´s, acetatos y ahora esto de las redes. Me ha tocado todo… 

Como sorpresa voy a llevar unos cuantos discos de Ruido en el Corazón para Álamos para quien esté interesado.

OG.- Vamos por la nueva banda ¿Qué le dirías a alguien que va a escuchar por primera vez a Rafael Catana? 

RC.- Con esta banda (La Roosterband) ya tengo más de seis años tocando. A veces nos dejamos de ver, pero volvemos. Y nos pasa un suceso intergeneracional con la banda puesto que hay tres generaciones de distintas latitudes: está Luis Corro en la batería, de la CDMX, Damián Martínez que es de Tlaxcala y toca el bajo, Gustavo Beltrán en el bajo y el acordeón, que es de Puebla y Miguel Gallo Esparza en la guitarra, directo desde Aguascalientes. Y su servidor que es de Veracruz, de Punta Chueca, de Oaxaca, de Hermosillo. Entonces todo esto me ha llevado entender a este país, a su diversidad cultural, a sus generaciones. Como lo haremos ahora que vayamos al FAOT, allá en el estado del Sol, del desierto…

RAFAEL CATANA Y LA ROOSTERBAND

MIÉRCOLES 25 DE ENERO DE 2023

20:00 HORAS

LA ALAMEDA, ÁLAMOS, SONORA, MÉXICO

Para más info: 

«Los músicos del movimiento rupestre, eslabón perdido del rock»

Sobre el autor

Narrador. Originario de Navobaxia, municipio de Huatabampo, Sonora.

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