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¿A qué sabe la venganza? ¿Por qué es incierto el futuro de la NBA?¿LeBron James o Michael Jordan?

Leamos a Carlos A. Gil

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Cuando hablamos de la venganza, dejando fuera si es correcta o no, siempre es satisfactoria para quienes logran concretarla; especialmente hablando de deporte. Las finales de la NBA fueron eso, una venganza de los Golden State Warriors sobre los Cavaliers y una demostración de que los deportes y la naturaleza humana vienen estrechamente relacionados.

El recuento de las finales

Los primeros dos juegos hubo una demostración ofensiva impresionante de parte de Golden State Warriors por culpa de unos Cavaliers tímidos a la defensiva. El juego es divertido cuando realmente se disfruta en equipo, eso fue lo que hizo GSW, jugar a su estilo, no hubo héroes, todos fueron un solo cuerpo y los resultados se dieron por ventajas en promedio de 20 puntos los primeros dos partidos.

En el juego 3 yo esperaba que jugar de local influyera en Cleveland, que se marcara la diferencia y que protegieran su casa o como dirían ellos: “Protect the Land”. Un juego emocionante, de ida y vuelta donde empezaron a llegar a la cita los demás jugadores de Cleveland y aportar un poco más a la ofensiva. LeBron James se cansó de buscar el aro, se cansó de trabajar en buscar contactos y crear oportunidades para sus compañeros. Sin embargo GSW continuó haciendo su trabajo y produciendo, Klay Thompson comenzó a aportar más ofensivamente, anotando un tiro de tres que puso 1 punto abajo a GSW desde la esquina con 4 minutos en el reloj del último cuarto.

Después LeBron con una penetración jala la marca y logra alimentar a un J.R. Smith abierto en el ala, la asistencia genera un tiro cómodo de 3 y se logra la anotación, el marcador sería 113-109 a favor de los Cavs. Siguiente jugada, Kevin Durant lograría un tiro de corta distancia sobre Tristan Thompson, lo que los pondría a 2 puntos del local. Cleveland no logró anotar la siguiente posesión ofensiva y Kevin Durant vuelve a tomar el destino de su equipo en sus manos intentando y consiguiendo una canasta de 3 puntos con 46.6 segundos del último cuarto por jugar, ahora los Warriors estaban arriba en el marcador por un punto.

El cuerpo técnico de Cavs llamaría tiempo fuera, diseñaría la jugada que le daría certeza ofensiva a Cleveland que necesitaba responder y lo diseñado fue un pase a la esquina donde LeBron James intentó, mas no concretó un tiro de 3 que fue bloqueado por Andre Iguodala, al mismo tiempo LeBron toca el balón y este sale de la cancha… Golden State Warriors había impuesto su regla de oro, el marcador final era de 118 a 113 con una serie que se iba a 3-0.

Llegaba el 4 encuentro de la serie y toda la presión estaba en Cleveland, para ellos en cualquier momento podría terminar la serie. Cleveland debía estar a la altura de las circunstancias, debía  dar el ancho en una final de NBA con la que tanto sueñan millones de personas en el mundo, era el momento de no dejarse ganar, podrían perder y eso no está mal, pero dejarse perder nunca. Y así fue, Cleveland dio el juego prácticamente perfecto con una primera mitad que llegaron a anotar 86 puntos (sí, 86 puntos es lo que a veces se podría llegar a anotar en un juego completo y Cleveland marcó el record de más puntos anotados en una primera mitad de finales) y LeBron pasó a Michael Jordan como el tercer mayor anotador de las finales de la NBA con 1,177 puntos anotados y también pasaba a Magic Johnson con más triples dobles en finales con 9 en total. Un juego donde todos aportaron en Cleveland, donde todo salió bien y como debería para los Cavs.

En pleno tercer cuarto Lebron James se hizo de palabras con Kevin Durant y desde ese momento la diferencia se hizo más pronunciada, con una jugada donde LeBron se da un pase a sí mismo rebotando la pelota contra el tablero, agarrándola a medio aire y clavándola con las dos manos. Cleveland había logrado quitarle el invicto en Playoffs a GSW y veía un poco de luz. La serie estaba 3-1, un familiar 3-1 que nos hacía pensar que la historia del año pasado se podría repetir.

En el 5to juego estábamos de vuelta en Oakland, un estadio lleno y ruidoso apoyando a su equipo que estaba ansioso por prender los habanos, nadar en el mar de champagne con los “googles” en los vestidores y gritar como niños. El primer cuarto fue reñido pero Cleveland logró llevarse la ventaja y a partir de ahí cayeron en un abismo, empezaron las pérdidas de balón, los tiros apresurados y las ofensivas mal armadas que le dieron a GSW oportunidad de irse al frente y ganar un segundo cuarto decisivo, Cleveland logró imponerse en el tercer cuarto  cosa difícil ya que GSW siempre llega del medio tiempo inspirado pero  no importó y al final Golden State lo había logrado; se coronaba en casa, se sacudía el amargo sabor de boca del año pasado y Kevin Durant alcanzaba su primer anillo, ese anillo había llegado y solo él sabe todo lo que se sacrificó por ser el campeón. De ser un niño que superó la pobreza, de ir contra todos los pronósticos de “scouts” por ser muy delgado, ese mismo niño que le recordó a su madre que ella era la jugadora más valiosa por haber sacado adelante a él y a sus hermanos había logrado poner su nombre en la historia como el jugador más valioso de las finales y campeón de la NBA.

El futuro de la NBA

La temporada terminó el día 12 de Junio del 2017 y quedan muchas dudas sobre el futuro de la NBA, es una era donde todo se caracteriza por armar auténticos súper equipos, concentrar estrellas en ellos y marcar una distancia con el resto de la liga. Si a mí me preguntan, la NBA se ha venido convirtiendo en una liga de 3 o 4 equipos que puedan disputarse de tú a tú el campeonato y esto podría ser un problema a futuro para la liga ya que entre más competencia haya más disfrutarán los fanáticos de ella y eso daría mayor rating al deporte y mayor derrama económica a su vez. Fuera de estos equipos no hay mucho que ver, algunos equipos están en pleno proceso de madurez y crecimiento con talentos muy jóvenes que servirán para marcar el futuro de la liga. Y hablando del futuro, el draft es el 22 de Junio y el primer pick lo tiene Boston que se las ingenió para jugar las finales de conferencia contra Cleveland este año y adquirir ese tan deseado primer pick de la lotería de jugadores que vienen directo de la universidad.

Se vienen contrataciones, cambios y movimientos de los equipos, siempre hay sorpresas pero la verdad es que lo sorprendente sobre el verano de la NBA es la capacidad que tienen los directivos para jugar con las reglas y armar siempre combinaciones interesantes que permiten a sus equipos obtener ventajas sobre los demás.

El caso LeBron

Por último, ya no importa lo que LeBron James haga, las personas jamás estarán satisfechas con su desempeño, siempre ha sido exigido más que cualquier otro jugador. Será odiado por muchas personas sin importar nada más, es curioso que la mayoría de los que les preguntas por qué no les gusta, no lo sabe y solamente quieren que no gane. La comparación siempre será con Michael Jordan, ¿quién es mejor? ¿Algún día estará a la altura de ser comparado? Etc… Este debate jamás se solucionará porque no tiene respuesta a mi punto de vista, LeBron es el resultado de una era donde dominó Kobe Bryant y Tim Duncan, a su vez ellos son resultado de una era donde dominó Michael Jordan y antes Larry Bird y Magic Johnson, así nos podemos ir hasta el inicio de la NBA.

Lo que yo recomiendo es que disfrutemos las eras, disfrutemos el talento de cada uno de los jugadores que marquen épocas, la comparación siempre va a existir, el morbo de saber quién es el mejor de la historia siempre estará ahí y pienso que no existe una respuesta concreta, es muchísimo más complejo que decir un simple nombre o hablar unas cuantas estadísticas. A veces lo mejor es dejar de buscar tantas respuestas y comenzar a disfrutar lo que tenemos justo frente a nosotros, el presente, apreciar lo que hay en este momento como el talento de LeBron quien ha llegado a 8 finales de las cuales 7 han sido consecutivas… ni por casualidad, ni por suerte.

Por Carlos Gil

Fotografía de Jerry Lai / US Presswire

Sobre el autor

Hermosillense adoptado. Contador público, comerciante y emprendedor. Aficionado al deporte, la cultura y la ciencia. Amante de las buenas conversaciones y el intercambio de ideas.

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1 comentario

  1. Definitivamente las comparaciones siempre existirán. En el infortunado caso de LB al ser comparado con MJ, es en parte por una misma alimentación del mismo LB al caer en provocaciones. Sin embargo, es innegable el desapruebo de muchos hacia el. Lo único que hará que siga estableciendo marcas es que siga jugando como sabe hacerlo, aunque es probable le pase lo que a Roger Maris… ¿Roger quien?

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