Benjamín Alonso RascónCiudad Obregón, Sonora.-
A los problemas por inseguridad que azotan esta ciudad, se ha sumado el de la lluvia, que antenoche cayó a raudales y lo mismo ayer por la mañana en forma de una una cascada hechiza, falsa, apócrifa, producto del pésimo trabajo del organismo operador del agua en el municipio de Cajeme, OOMAPASC, a decir de obregonense lector de Crónica Sonora.
«Cascada» sobre el paso a desnivel de por sí inundado en calle No Reelección, con todo y tráiler «a bordo».
«Y eso que acaban de arreglar el paso a desnivel», opinó el lector de apellido Locos.
-¿Quiénes?
– Los weyes (sic) que madriaron (sic) el camellón y el pedazo de la Jalisco a la Sufragio. O sea OOMAPASC, pa’ variar.
Al respecto, el reportero Segio Anaya del portal InfoCajeme, publicó esta mañana de miércoles:
Hace dos años, cuando la temporada de lluvias puso en evidencia el mal diseño y reconstrucción de las calles Jalisco y Sufragio Efectivo, convertidas en una laguna, los funcionarios del Ayuntamiento aseguraban que una vez terminado el colector pluvial en la calle 200 y otras obras de desfogue, no se volvería a presentar el problema de inundaciones en el extremo sur de ambas calles.
La tormenta de este martes exhibió de nuevo que no fue solo el factor tiempo -el retraso exagerado- sino también su pésima calidad como obra de ingeniería, aunque hasta hoy todos nos hemos centrado en el primer factor.
No obstante, los telediarios de anoche dieron cantidad de minutos al director de protección civil municipal, de nombre Francisco Mendoza, que no se cansó de festejar el saldo blanco en lo que hace a personas fallecidas o lesionadas a consecuencia del diluvio. ¿Aplica aquí la metáfora del vaso medio lleno/medio vacío? No lo creo. Aplica, más bien, el sesgado discurso de los políticos de ayer y de hoy, sean del color que sean, inclusive guindas, ese color de moda que empero se ha ido deslavando y no a fuerza de precipitaciones atmosféricas.
Texto y fotografía por Benjamín Alonso
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