Este fin de semana las y los ciudadanos de Hermosillo fuimos testigos del gran trabajo que realizan organizaciones de la sociedad civil. Por un lado, los integrantes del movimiento corredor biológico en interacción con Ciudadanía Activa reiteraron, a través de rueda de prensa, que están dispuestos al dialogo fructífero con la máxima autoridad de este municipio.
A partir de una exigencia básica, no a la venta de los terrenos deportivos de El Cárcamo, un grupo de ciudadanos de distintas disciplinas académicas ofrecen argumentos por los cuales es necesario no sólo vender sino recuperar ese espacio público, para las y hermosillenses.
Primer argumento, nuestra salud. De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha asegurado que se requiere un árbol por cada tres habitantes para respirar un mejor aire en las ciudades y un mínimo de 10 a 15 metros cuadrados de zona verde por habitante. Entonces porqué sacrificar un espacio como tantos otros que se han ido vendiendo, cuyo recurso no vemos cómo impacta positivamente para la vida de sus pobladores.
Incluso, la Organización de Naciones Unidas ha reconocido ampliamente que un crecimiento urbano rápido y sin planificar puede generar pobreza y desigualdad. Sin embargo, un espacio verde o con la flora y fauna nativa genera mayor cohesión social por lo que hay una relación directa y proporcional con los índices de mayor o menor violencia.
Segundo argumento, deporte. En la ciudad del sol es un bien escaso. Pocos son los lugares donde se puede hacer ejercicio al aire libre. Este es el caso del Cárcamo, un lugar donde co habitan jóvenes que están inscritos en ligas de foot boll, béisbol. o realizan bici cross y moto cross. Estos grupos ecologistas han realizado intensas jornadas de limpieza y están a la espera de que se abra un dialogo con sentido común.
Tercer argumento, la narrativa. La Sauceda es parte de la historia de la ciudad que hace unos días festejaba sus 320años. Ciudad joven sin duda, la solicitud por parte de estos grupos de sociedad civil es que se declare como área natural protegida a La Sauceda, Parque Villa de Seris, El Cárcamo y Parque Madero.
Así mismo Hermosillo Cómo Vamos, otra Organización de Sociedad Civil, que ha trabajado intensamente para construir confianza entre diversos actores sociales. A lo largo de casi cuatro años, han podido integrar una sociedad que converse sobre cuáles son sus prioridades en atención a los problemas.
Y en medio del gran desafío que implica la contingencia sanitaria, esta Organización promovió un proyecto específico: #VaPorHermosillo, que tiene como propósito reunir el apoyo solidario de muchos más ciudadanos para reunir un Fondo de 100 millones de pesos que ha sido destinado poco a poco, a comprar despensas para personas en desventaja y que han sido entregadas por aquellas organizaciones que tienen trabajo cercano a las comunidades.
En ese marco, se llevó a cabo un concierto de rock donde participaron de manera entusiasta diversos medios de comunicación y cámaras empresariales. El fruto de este trabajo de unión y compromiso fue conseguir un poco más de medio millón de pesos que serán duplicados por otro empresario. La solidaridad es la posibilidad que tenemos de buscar mejores alternativas para las y los más vulnerables.
Y si bien nos sentimos empatía con esos movimientos espontáneos en favor de los demás, que mal que no podamos decir lo mismo de los gobiernos, entumecidos como siempre, pensando en que no tienen dinero, y es verdad porque el que les antecedió se lo llevó para beneficio personal. Esto sí, que indigna.
En fin que al mal tiempo, buena cara.
Isabel Dorado, cabeza del ambientalismo hermosillense, instruyendo a chamacos voluntariosos en una imagen de 2011