Hermosillo, Sonora.-

Conocía a Mónika Ejerhed hace muchos años, debido a que es residente de mi colonia, la veía pasear en bicicleta desde que era muy joven. Cierto día llegue a entrevistarla a su residencia, y estaba con un pico y una pala cavando un foso, y le pregunte ¿Qué haces?, hago mi propia alberca me dijo, y yo no le creí, al tiempo vuelvo para  cerciorarme que lo que dijo era verdad, y en efecto, descubrí una alberca perfectamente realizada con azulejo azul, filtros de purificación y limpieza,  además un estanque enseguida con peces anaranjados simulando un laguito japonés.

La he entrevistado alrededor de cinco veces, y en diferentes épocas y etapas de su vida, son casi 3 décadas de conocerla y tratarla, y descubrir en ella a una mujer que se reinventa a pesar de los avatares de la vida.

Mónika es una escultora sueca nacida el 5 de mayo de 1942, residente en México desde 1961. Ha cursado estudios de pintura, Dibujo y Grabado en Casa de la Cultura de Sonora; cerámica, Dibujo y escultura en la UNI-SON; Figura humana en La Esmeralda, talla en madera, escultura de metal y Cerámica en la Academia de San Carlos de la UNAM, y fundición en bronce en el taller Maldonado, todo en la Ciudad de México.  (estos datos me los mandó mi amigo Nacho Lagarda Lagarda, cronista de la Ciudad, porque dice que siempre hablo de mis entrevistados como si los demás supieran o los conocieran tan bien como yo, esto después de mandarle una foto con Mónika desde mi página Tik-Tok. Gracias Ignacio por estos datos).

Al llegar a su casa, le pregunto por qué no nos sentamos hablar de ti, de tus inicios, y le aviento la primera pregunta:

-¿Cómo llegaste a México? 

Tomé un barco de raite de Suecia a Holanda, me vine en un barco de carga, y me fui primero a Miami, y luego a Veracruz,  o sea cargaron comestible, y a mí me asaltaron, -¡ay yo no sabía lo que eran los Estados Unidos!, en fin, todo esto fue en 1961.

-¿Y porque llegar a México a residir? 

 Porque estaba yo trabajando  en Italia, todos los veranos salía, pero nunca tenía dinero, entonces  iba de raite donde podía y trabajaba en Servicios Voluntarios, pero había gente de todo el mundo, y estando en Italia habíamos gente cómo de 12 nacionalidades, pero ahí vi yo un mexicano, y bueno,  ahí mejor le paramos.

-¿Y  la escultura por qué?

 Siempre he sido muy práctica, me decía mi papá que yo era muy práctica, siempre hacía cosas, hacía lanchas de troncos, hacia trineos, esto lo hacía yo como cuando tenía ocho o nueve años, siempre construía cosas, y mi mamá también era pintora, más bien era dibujante durante la Segunda Guerra Mundial, pero también pintaba, nunca llegó hacer así profesional como para vender pero le interesaba mucho el arte y ese ambiente.

“Siempre hacía cosas, pero yo no empecé con la escultura hasta cuando me divorcié, es cuando dije ¿Qué hago con el tiempo libre que me sobra? , pero de todas maneras tenía todo para hacer escultura, porque yo todo lo hacía en la casa, yo pintaba, yo ponía luces, reparaba muebles, hacia toda la ropa de mis hijos, hacia macramés, yo no podía ver la televisión así nomás, me ponía a hacer macramés, todavía yo no puedo ver la televisión sin hacer otras cosas, es decir sabía manejar herramientas pues, y cuando empezó la Casa de la Cultura, empecé a pintar y ahí conocí a algunos escultores, y conocí el barro y a Ciro Sotelo también”.

¿Y la madera es muy de los países escandinavos también verdad? 

Sí, hacen muchos muebles de madera, vivimos muy cerca de la naturaleza, vivimos muy en comunión  con la vegetación, incluso los apellidos es combinación de diferentes partes  de la naturaleza.

Me quedo viéndola cuántos años hace desde que la conocí, cuando era un adolescente esbelto e imprudente, y me doy cuenta que sigo siendo imprudente, pero ya no soy esbelto ni adolescente, en fin, que fue un momento importante para mí después de tener mucho tiempo sin verla, y espero seguir entrevistándola y que ojalá algún día la ciudad tenga una enorme escultura de su autoría.

FIN

Por Cipriano Francisco Durazo Robles

Fotografías de Cristobal Castillo

 

Sobre el autor

Cipriano Durazo Robles es Licenciado en Periodismo por la Universidad Kino y Presidente de la Sociedad Amigos del Museo de Historia de la Universidad de Sonora. Articulista de radio y medios digitales. Se desempeña como dictaminador sanitario de la publicidad en COESPRISSON (Comisión Estatal de Protección Contra Riesgos Sanitarios del Estado de Sonora).

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4 comentarios

  1. Excelente entrevista, pero nos deja picados el autor, ojalá continúe. Monik es una gran persona, me encanta platicar con ella sobre arte y creación, tienen ideas muy interesantes

    1. De hecho estuvimos hablando de usted, Mónika lo estima bastante, y recordó que usted se disfraza de El Quijote de la Mancha. Saludos.

  2. Mónica es Encantadora! Una Mujer muy Bella y Creativa. Resiliente. Estoy a sus órdenes. Estimado Amigo Cipriano: Creo que debes de ampliar la entrevista. Queremos saber más de Mónica.

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