Mi primer día en el FICD: Unos cortos más o menos y una ‘peli’ alucinante

Luna y Danelly nos cuentan su primer día en el Festival Internacional de Cine del Desierto

Así se estrenan en Crónica Sonora 😀

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Inauguración del Festival Internacional de Cine del Desierto

El festival comenzó desde las 4:00 p.m., entré unos minutos más tarde pero no me perdí de nada. Lo primero proyectado en la pantalla fue una animación hecha por los Neuderts anunciando el FICD. Luego empezó la exhibición de cortometrajes en competencia. El primero, Ausencia, tenía una buena historia, las tomas fueron muy buenas pero el trabajo con los actores fue pésimo, especialmente en las escenas dramáticas. El segundo fue El Compadre Medina que tuvo un poco de todo, las tomas eran preciosas, una historia un tanto confusa, un toque de suspenso y un poco de sangre, la cantidad correcta de todo. El tercero fue Juana.mov que era de terror, como primera instancia sólo pensé en el terror, llenaron el objetivo de transmitirme como espectadora eso mismo que el actor sentía. Continuamos con Tatau, un documental sobre un tatuador, las tomas eran buenas y la historia entretenida, sin embargo, sentí que habían quitado ese ¡PUNCH! que ya habían logrado con los recientes dos cortometrajes. El último fue Tulipanes: no podría definir el género; fue bueno ya que transmitía la esencia del cinematógrafo que siente que su trabajo es basura, pude llevarlo a mi propia piel y volverlo una experiencia más interna aunque al principio sólo fuera confusión pura.

Al terminar todos los cortometrajes pasaron a tres directores y una representante de otro director; de Ausencia no fue nadie. Nos contaron sus experiencias y la historia detrás de sus trabajos, cómo fue que llegaron a esas ideas y sus vivencias al rodarlos; también se abrió un espacio de preguntas y respuestas donde ninguno preguntamos nada (excepto el editor de Crónica Sonora, que preguntó si Juana.mov era un trabajo escolar del CUEC-UNAM. Nota del editor), salimos del auditorio de MUSAS y al no saber dónde se llevaría a cabo Conversaciones en el Desierto, me dirigí al parque de MUSAS con mis amigas, donde después nos alcanzó Carmen.

Después de esperar un rato a que dieran las 7:20 p.m. fuimos al Oxxo de por ahí cerca y luego a Casa de la Cultura a comer y esperar para entrar a la función de las 7:30. Comimos y nos estuvimos un rato. Pasada la hora la gente empezó a entrar al lugar; a las 7:40 empezó la inauguración con un discurso por parte de dos organizadores, el director del ISC, la representante de la embajada de Colombia y el rector de la UNISON. Se nos presentó al director de la película Los Nadie, Juan Sebastián Mesa, concluyendo con eso el discurso y empezando la proyección de la película.

Los Nadie es un recuerdo grato, es ese tipo de películas que te atrapan desde la primera escena, desde el primer sonido, el primer segundo y desde el primer personaje con el que uno mismo hace clic. La trama es de un grupo de jóvenes, unos menores y otros mayores de edad, que «talonean» en las calles de la ciudad de Medellín, Colombia; la película está en blanco y negro, lo cual me dejó un sentimiento de tristeza, melancolía, de deseo… Fueron muchas emociones que con el simple color, o la falta de color, te daban la idea de una película donde lo principal no iba a ser la vida feliz de cinco jóvenes. La película fue una combinación del ambiente punk, con la taloneada en las calles, el consumo de drogas, el arte urbano, los barrios peligrosos y los movimientos estudiantiles que atentan contra la vida de todos, además de un bonito acento colombiano… La palabra perfecta para describir a esta película es alucinante.

Al terminar la película hubo un espacio de preguntas y respuestas con el director: cuánto duró el rodaje, la similitud entre el poema “Los Nadie” -del poeta Eduardo Galeano- con la película, cómo llegó la idea a su cabeza, cómo fue el casting y hasta la selección del soundtrack. Mesa contestó cada pregunta que se le hizo y así finalizó la inauguración del Festival Internacional de Cine en el Desierto.

Por Luna Fernanda Guzmán

 

Mi experiencia en el FICD

Por Danelly del Carmen Gálvez

Hoy tuve el placer de asistir al primer día del festival. Al principio no sabía si podría asistir pero ya estando ahí disfruté de buena compañía y una vez que finalizó el día sé que valió la pena cada segundo. La serie de cortometrajes que se llevó a cabo en el auditorio de MUSAS fue una excelente elección para dar comienzo a las siguientes actividades, ya que logró que entrara en ambiente y me generó la inquietud de querer ver un poco más.  En el tiempo de espera que se dio entre los cortometrajes y la inauguración de la proyección de la película colombiana aprovechamos para relajarnos en el parque que se encuentra enseguida de MUSAS, el lugar perfecto para descansar un poco y conocer a nuestra nueva amiga Carmen. Tenía altas expectativas con la película gracias a las ediciones anteriores del festival y es gratificante decir que logró alcanzarlas.

La película Los Nadie cuenta con una gran línea narrativa que se mantiene fluida y suave para el espectador, con una fotografía que logra atraparte y  fracturar la temporalidad, además de lograr el objetivo deseado que es resaltar a los personajes. El director Juan Sebastián logró una gran obra donde el espectador puede transformar el contexto social y cultural mostrado y asumirlo al propio, además de contar con una gran selección de casting, que a pesar de no ser actores profesionales lograron un espléndido trabajo. Es importante quedarse al final porque sólo datos como el anterior se pueden saber gracias a la serie de preguntas que se realizan al finalizar la proyección, ya que se cuenta con la presencia del director.

Fue realmente un día inolvidable y doy la gracias a Carmen Mendívil por presentarme a María José Enríquez y así tener la oportunidad de compartir mi experiencia en Crónica Sonora. Sólo un consejo: no se fíen completamente de Uber, a veces falla en los momentos menos oportunos.