Los vuelos del pato salen caros

Nuevamente el Secretario de Educación del Estado emplea los recursos públicos para hacer eventos que sirven para autopromocionar su imagen. En esta ocasión usa un torneo de tercias de basquetbol que llamó “Volando con el mejor” para posicionarse de la manera más burda y al mero estilo del PRI de los ochentas, pero con un toque mediático a la Berlusconi o Trump que nos muestra que para Ernesto “el Pato de Lucas” Hopkins, estar en la función pública es hacer realitys shows.

El torneo de tercias que promovió el Pato duró tres semanas, contó con la participación de más de 400 estudiantes de los diferentes niveles escolares y las finales se jugaron en las oficinas de la Secretaría de Educación Estatal, en las que hubo show, espectáculo, sonido,  luces, fuegos artificiales, bombo y platillo. Todo un espectáculo donde no se escatimaron gastos con tal de dejar manifiesta la opulencia de este aprendiz de Silvio Berlusconi a la sonorense y que con el “Splash de la Educación” está dejando ver que su sello característico para posicionar su imagen es el derroche.

Los participantes en las cuatro diferentes categorías llegaron de todas partes de la entidad, alentados por el nada desdeñable premio de un lugar con todos los gastos pagados en el Michael Jordan Basketball Camp en Santa Barbara California del 28 de julio al primero de agosto. Tanta generosidad del Secretario con los niños no tendría nada de grave si no fuera porque usa dinero público en un evento que se promociona para posicionar su imagen, y porque en vez de promover valores deportivos, el torneo parecía más un reality show dirigido a adolescentes varones de familias económicamente pudientes. Por eso no es de extrañar que los equipos ganadores de las tres categorías fueron de escuelas o colegios particulares, dejando ver que desde la planeación el torneo estaba diseñado para hacer diferencias, tal y como se ha hecho en otros realitys shows de este gobierno como lo han sido las “Mujeres de 100” o los “Jóvenes de 100” algo muy característico de este gobierno.

Saquemos cuentas: del Splash al premio por “Volar”

Cuando funcionarios como el Pato son interrogados por el uso de los recursos en eventos que supuestamente son en beneficio de la ciudadanía pero que en realidad tienen la función de posicionar la imagen de un político, como claramente lo son el “Splash de la Educación” o “Volando con el mejor”, estos siempre niegan sus ocultas intenciones para dar carpetazo apostando por el olvido y que nadie investigará más. Esta estrategia normalmente les funciona porque las empresas dedicadas a la comunicación tienen como clientes a las secretarias en la venta de publicidad e incluso promocionan los eventos que sus periodistas deberían estar investigando. Sin embargo en esta ocasión, desde un periodismo ciudadano se usó la página de acceso a la información del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI) para solicitar las facturas de los gastos en estos eventos, obteniendo los siguientes datos del “Splash de la Educación”.

De acuerdo a la respuesta que se dio en la solicitud con folio 00438471 el “Splash de la Educación” tuvo un costo de $111,406.40  nada más en lo que fueron renta de inflables, sonido y mobiliario. Pero si se hace un análisis de las facturas encontramos algunas inconsistencias que advierten que el gasto pudo haber sido mayor. Tanto el comunicado de prensa como las notas que salieron sobre el evento vacacional de la Secretaría de Educación dan a conocer que este se llevó a cabo tanto en Bahía de Kino como en San Pedro los días 13 y 15 de abril, lo que implicó dos logísticas. Sin embargo tanto la renta de inflables, como de la planta de luz, se manejaron con precio unitarios, lo que nos advierte que quizá la respuesta que se dio a través del portal de transparencia estaba incompleta y por lo mismo que el gasto total fue mayor al que aquí estamos dando.

 

Desglosando la información de las facturas encontramos que los proveedores para el “Splash de la Educación” fueron tres: Roal Nueve Soluciones Sa. de CV, Rogelio Artega Cárdenas y Gilbrán Omar Rosas. La primera empresa cobró 20,926 pesos en conceptos como servicio de pipas de agua por 12,400 pesos, unidades de espuma por 3,000 pesos, además de renta de lonas por 2,640 pesos. En cuanto a la renta del sonido, vallas, carpas y una planta de luz, esto lo rentó Rosas Moreno por 60,320 pesos. Arteaga rentó los inflables, dando una factura de 30,160 pesos, en la que únicamente se registraba una sola cantidad del producto que se rentaba, pero no se especificaba el número de inflables. Esto último despierta muchas dudas porque en las fotos de los eventos se ven varios inflables, y si tomamos en cuenta que fueron en dos sitios, podemos sospechar que quizás hace falta otra factura de una cantidad parecida por los inflables faltantes.

Una inversión parecida a la del Splash debió haber sido también la del torneo “Volando con el mejor”, aunque aún hace falta confirmar con información oficial que nos pueda dar el portal de transparencia. Sin embargo, lo que sí podemos saber es el costo de los premios que se dieron, los cuales están en la página oficial del Michael Jordan Basketball Camp y son en dólares norteamericanos. De acuerdo a lo que dice el portal del campamento sabemos que por día para los campistas que dormirán allí el precio es 1,740 dólares, lo que equivale a que por cada ganador del torneo se tiene que pagar nada más en el campamento 8,700 dólares que con el tipo de cambio actual serían 157,115 pesos. Ahora recuerden que del torneo “Volando con el mejor”, son 12 lugares en el campamento los que se van a dar, esto significa que en el premio la secretaría de educación se estaría gastando la nada triste cantidad de 1,885,380 pesos.

Si sumamos los gastos que aquí hemos podido comprobar en estos dos eventos, podemos decir que el Pato de Lucas, nuestro Secretario de Educación en Sonora, se ha gastado la nada modesta cantidad de 1,996,786 pesos en promover su imagen con eventos que no tienen ninguna justificación pedagógica que ayude a beneficiar el rendimiento educativo de los estudiantes en la entidad. Ahora, a esta cifra se le tiene que sumar los gastos de traslado para los 12 ganadores de “Volando con el mejor”, sueldos, aguas, sodas, galletas y banquetes que siempre acompañan estos eventos; lo que fácilmente podría llevarnos a decir que en el último semestre Ernesto de Lucas usó más de dos millones destinado para la educación en promover su imagen política.

¿Para qué se pueden usar 1,996,786 pesos?

Entre los indicadores que anualmente usa la Secretaria de Desarrollo Social para saber cuál es la situación de la pobreza y el rezago social están los que señalan el porcentaje de la población de quince años o más que es analfabeta, así como el de la población de niños de 6 a 14 años que no asiste a la escuela. Afortunadamente en el informe anual para este 2017 los porcentajes no son muy altos, 2.18% de la población mayor a 15 años es analfabeta y solamente 2.84% de los niños en edad escolar no van a su escuela. Sin embargo este dato muestra que aún hace falta invertir para que esos 2% no existan y tener una cobertura educativa total.

Para poner en dimensión que implica el gasto innecesario de casi dos millones de pesos en material didáctico para nuestro sistema educativo tenemos que ver cuántos pintarrones interactivos, pintarrones y marcadores se pueden comprar con ese dinero. Si mañana nuestro sistema educativo quisiera que todos los salones de clases cuenten con pintarrones interactivos para apostar en la innovación tecnológica dentro de nuestras aulas ya no contaría con 26 de ellos si estos costarán los 74,000 pesos que dice la página de Office Depot. Pero si la secretaría no fuera tan ambiciosa y solo quisiera renovar los pintarrones comunes de los salones que tienen un precio 5,000 pesos en el mercado, con los gastos del Secretario en sus eventos ya no podría comprar 399 pintarrones. Por último, si la Secretaría de Educación quisiera darle marcadores de 76 pesos a todos sus maestros, esta no podría darles 27,235 porque el Pato de Lucas ya se gastó el dinero en sus dos eventos para posicionarse como el posible futuro alcalde de Hermosillo.

Si a lo anterior le quisiéramos meter la problemática de los maestros cesados a los que Ernesto de Lucas Hopkins no quiere regresarles el trabajo, vemos que si todos ellos únicamente recibieran su sueldo base de 9,000 pesos al mes, con lo que se gastó el Secretario en sus eventos se pudo pagar el sueldo de 18 maestros por un año.

Eventos como el “Splash de la educación”, “Mujeres de 100”, “Jóvenes de 100” y “Volando con el mejor” son sellos característicos de una forma de gobernar que apuesta más por el espectáculo que por la gobernanza. Pero que también implican gastos que no ayudan a combatir la desigualdad sino a todo lo contrario, dividen para beneficiar a grupos selectos. Al final la apuesta por espectáculo por parte de quienes gobiernan no es mejorar o beneficiar a la ciudadanía, más bien tiene el objetivo de posicionar la imagen de alguien con recurso público de una forma muy perversa, donde se aprovechan de la alegría de los niños para justificar acciones que únicamente tiene el fin de apuntalar la carrera política de alguien, en este caso la de un pato que se presume como el mejor desde la Secretaria de Educación.

Por Hermes D. Ceniceros

El Secretario De Lucas en la presentación de Volando con el Mejor

Fotografía de Canal Sonora