Ha llegado a nuestra mesa de redacción la siguiente carta abierta

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En mi casa me enseñaron que jamás debes arruinar una disculpa con una excusa. Me lo enseñaron también en la iglesia, y a pesar de que ahora en mi vida adulta no profeso religión alguna, al día de hoy es una de las enseñanzas que aplico con esmero.

Una disculpa debe ser antecedida por un acto de contricción, es decir, un análisis de la falta y un verdadero arrepentimiento; asimismo debe ser precedida por un propósito de enmienda, es decir, la intención de reparar de alguna manera el daño que hemos causado con aquella transgresión motivo de la disculpa.

Para aquel que sabe leer entre líneas tu disculpa, Santo’s Grill, no es tal. Tu declaración y postura oficiales no son más que un despliegue de justificaciones con las que pretendes excusarte de un acto de discriminación inaceptable. (Nota del editor: el comunicado oficial de Santo’s Grill lo puede leer al final de esta carta).

Si nos quedaban dudas sobre si fue el mesero o la administración quien se tomó la facultad de discriminar a estas señoritas, estas fueron disipadas por completo después de leer el comunicado, en que se deja ver con claridad que la intolerancia proviene del corazón mismo de la empresa.

Pero hablemos de estas justificaciones: mencionar la cantidad de colaboradores de la empresa como el motor económico de sus familias es, además de irrelevante para estos hechos, un intento de explotar la compasión entre los lectores de tu comunicado, atrayendo la atención hacia el hecho de que una repercusión económica sobre sus acciones traería dificultades financieras a dichos colaboradores. Todos los que trabajamos somos el motor económico de nuestras familias, esto no es bajo ninguna circunstancia justificación para proceder de la manera en la que lo hiciste en contra, precisamente de quien contribuye a sostenerte como un prestador de servicios: Tus comensales.

Si tú crees que un acto de discriminación es justificable por la presencia de niños en el establecimiento, te equivocas rotundamente. La crianza y la educación de los hijos corresponden primordialmente a sus padres, si es decisión de estos educar a sus hijos en la intolerancia y la discriminación, es su derecho, es algo que no podremos evitar ni como individuos ni como sociedad. Lo que no debemos permitir, es que un criterio como este permee en los ámbitos sociales en los que convivimos todos los individuos y en los que es (o debería ser) nuestro derecho y privilegio ser tratados con dignidad y respeto. Si estos padres se sienten irrespetados por la libertad ajena pueden tomar a sus hijos de la manita y encerrarse con ellos en casa, porque fuera de ella convivimos y coexistimos todos con todo el abanico de posibilidades que somos.

Decir que las demostraciones públicas de afecto fueron subiendo de tono es infinitamente subjetivo, pero he aquí un marco de referencia que puedes utilizar para futuras ocasiones: si no constituyen faltas administrativas dictaminadas por el bando oficial de policía municipal, no son censurables, independientemente de su “tono”.

En lo personal, tampoco disfruto ver muestras públicas de afecto (sin importar género o preferencia), voy más allá, me molesta dicho comportamiento. Sin embargo, y aquí es donde radica la importancia de la tolerancia al convivir en sociedad, entiendo y reconozco que evitar que otros lo hagan no es mi facultad, puedo decidir si me quedo o me voy, puedo decidir si lo presencio o no, pero no puedo bajo ninguna circunstancia coartar el derecho y la libertad que otros tienen esgrimiendo mis propios lineamentos morales o de cualquier otra índole. Puedo agregar a este respecto que existen muchos otros comportamientos públicos que encuentro infinitamente más reprobables pero que están tan normalizados en nuestra cultura y nuestra sociedad que en realidad pasan por completo desapercibidos y en estos dos casos y muchos otros sé que mis facultades llegan hasta donde empiezan las de los demás, sin que esto constituya, como mencionas en tu comunicado, una falta de respeto.

¡Inconcebible! el despliegue de intolerancia e ignorancia que existe en decirle a alguien que las manifestaciones visibles de ser la persona que es representa una falta de respeto hacia a los demás. Queda de manifiesto que no conoces ni la magnitud ni las proporciones ni los alcances de tu falta. El pensamiento de intolerancia intrínseco en tu discurso esta tan arraigado y normalizado que se te escapan todas las implicaciones de este acto reprobable

Pero no te preocupes, aunque si habemos quienes no volveremos a poner un pie en tu establecimiento, vivimos en una sociedad intolerante por excelencia, los que opinan como tú son los más. Si realmente primara la tolerancia no sería necesaria la acción de organismos reguladores que dictaminen y sancionen actos de discriminación como el ocurrido aquí. No perderás a la mayoría de tus clientes, cierto es, pero los que nos consideramos agraviados por tu proceder esperamos para ti una sanción ejemplar.

No te disculpes, Santo’s Grill. Esta sociedad provinciana, de la que eres digno representante, ya te ha perdonado porque comparte tu opinión.

No te disculpes. A aquellos a los que has agraviado no se les escapa la falta de legitimidad que hay en tu disculpa.

No te disculpes, cuando la PROFECO y la CONAPRED toquen a tu puerta tendrás la oportunidad de redimirte.

No te disculpes, paga tu trasgresión con dinero, todos sabemos que difícilmente volvemos a cometer un error que nos costó en el bolsillo.

A Silvia, a su novia y a toda la comunidad LGBTI les digo, sigan adelante con su lucha, sigan esforzándose por hacer de este un mundo más inclusivo y tolerante. No están solxs, también habemos personas que sin pertenecer a la comunidad y sin haber sido víctimas de discriminación, tenemos la empatía suficiente para sentir su dolor y luchar junto a ustedes. Un fuerte abrazo.

Por Natalie Navallez

Fotografía de Benjamín Alonso

Sobre el autor

Licenciada en Literaturas Hispánicas por la Universidad de Sonora, es d'esas que gusta de aprender sobre lo que nadie entiende y a nadie importa. Aficionada a la pluma más por convicción que por oficio. Defensora del lenguaje y de la responsabilidad individual. Partidaria de la libertad de ser y de elegir. Es amante de la comida, el vino y la cerveza. Se dice de ella que fue educada por Walt Disney... Ella opina que es cierto. Ya tiene cuenta en Facebook.

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27 comentarios

  1. Creo que tu carta está fuera de objetividad y solo con interes de perjudicar un establecimiento en donde muchas personas trabajan, tengo muchos amigos y amigas en la comunidad como tú la llamas sin embargo quien pide respeto también lo da, si no estuviste ahí cuando los hechos ocurrieron no puedes tomar partido como lo estás haciendo. Me gustaría ver más cartas que escribes con respecto a otros temas y no sólo con afán de perjudicar. Saludos!

    1. Si el establecimiento sale perjudicado por estos hechos, créeme que nada tendrá que ver mi carta en ello. Serán las consecuencias de sus propias acciones las que finalmente caerán por su propio peso. Mi interés no podría estar más lejos de perjudicar a las personas que ahí laboran, ni al establecimiento mismo, mi interés es dar una luz sobre una problemática que aqueja a nuestra sociedad porque lo que no se observa, no se controla.

      Dudo mucho que tengas amigos que pertenecen a la comunidad LGBTI, te diré porque. Yo empatizo con mis amigos, es decir, practico lo mejor que puedo la habilidad de ponerme en sus zapatos. Si fuera así en tu caso, no te sentirías capaz de decirle a tus amigos que ser ellos mismos es una falta de respeto hacia los demás y te rompería el corazón ver cuando alguien más se los dice. A lo mucho, tendrás conocidos.

      No existen requisitos para tomar partido, puedo tomar partido, puedes tomar partido (que lo haces), todos podemos tomar partido sin que para esto tenga que mediar circunstancia alguna. Ahora bien, no es necesario haber estado ahí porque para empezar mi carta esta objetando el comunicado oficial del establecimiento, no el hecho en sí.

      Gracias por tu comentario. Buen día

  2. Y Santos Grill quiere que se le disculpa pero ellos no manejan bien su postura puro interés y maquillan esa cartita dicen algo hacen otro…

  3. Es Mas ahorita quiero poner algo de comentario en la Pag. de Santos Grill y como en aquella ocasión que fueron groseros conmigo y lo publiqué y publiqué la respuesta del dueño hasta me bloqueó del Facebook… y mi queja la dije a ellos, frente a ellos y ni siquiera les importó.

  4. Santos Grill, yo diría que no tienes porque pedir disculpas; si tuvieron razón para proceder como lo hicieron no hay ninguna necesidad de ello. El respeto a los demás y sus derechos nada tiene que ver con que una pareja, hetero u homosexual se acaricie de determinada manera en un lugar al que se va a comer. Yo no estuve ahí, quien escribe esa carta tampoco, por lo tanto cualquier comentario carece de veracidad.
    Conozco parejas homosexuales que se aman profundamente y jamás los he visto ni siquiera besarse en público. Vivimos en una sociedad mocha, si así quieren llamarlo, y la tolerancia no es algo que se tome en pastillas ni se transmite por ósmosis. La sociedad debe evolucionar, de acuerdo, pero no será al ritmo que algunos, ustedes, pretenden. Todo a su tiempo. Eduquemos a nuestros hijos con respeto a la diversidad y en un futuro tendremos una sociedad más abierta…espero.
    Quien escribe la carta lo hace bien, se nota el oficio, pero hasta ahí. No estuvo ahí y hay dos versiones, creo firmemente que ambas tienen su parte de razón.
    No conozco el ya muy famoso Restaurante, y no creo que llegue a conocerlo porque creo que sus precios son algo elevados, pero por lo pronto yo, le voy a Santos Grill.

    1. Quiero mantener un dialogo civilizado en este asunto con todas las voces que deseen hacerse escuchar y así lo haré en la medida de lo posible. Hay varios puntos que me interesa destacar de tu comentario. El primero es que tengo la impresión de que no leíste mi carta hasta al final, de haberlo hecho sabrías que yo también les digo que no se disculpen, aunque no por los mismo motivos, en mi caso es más bien porque la falta de legitimidad en la disculpa la hace todavía más insultante. Asimismo, yo también como tú, hago referencia a que esta es una sociedad «mocha», aunque yo la llamé provinciana, me refiero exactamente a lo mismo que tú.

      La sociedad es, y ha sido históricamente intolerante a las diferencias, coincido contigo con que es un buen comienzo educar a nuestros hijos en el respeto a la diversidad, sin embargo no estoy de acuerdo en que hay que sentarse a esperar que el cambio ocurra de forma pacifica. Todos los cambios sociales relevantes, se los debemos a la gente valiente que se puso en la línea de fuego y exigió a rajatabla que se respetaran sus derechos. Así fue como se logró que las mujeres votáramos y hasta que podamos usar pantalón. ¿Verdad que al día de hoy suena absurdo que alguna vez las mujeres tuvieron que luchar por usar pantalón? Pues así como lo lees, es una realidad, y se lo debes a aquellas mujeres que no se dejaron intimidar por una sociedad «mocha» como la nuestra.

      En cuanto a la tolerancia, pues no sé que se tenga que hacer para obtenerla, no sé ni de donde la saqué yo, lo que si sé es que no tenemos porque esperar sentaditos, calladitos y de buen modo a que llegue el día que la sociedad la adquiera. Es muy triste que el pensamiento conservador arraigado tan profundamente declare que necesitamos su permiso y su anuencia para ser tratados todos los seres humanos con igualdad, como si tuvieran superioridad jerárquica. No lo tienen

      Por ultimo te invito a la congruencia, es claro que tu posición es a favor del restaurante, es claro que la mía es a favor de las personas agraviadas por el mismo. Luego entonces hay falta de veracidad tanto en tu postura como en la mía. Ahora, como ya comente más arriba, la mía es una respuesta al comunicado oficial del establecimiento que puedes leer aquí mismo.

      Gracias por tu comentario. Saludos

  5. Bueno. Primero contéstame tú a mí una pregunta. ¿Hay, de hecho, alguien que se crea ese cuento (el cuento de que una pareja heterosexual hubiera recibido el mismo trato)? Es una pregunta retorica porque la respuesta es no. Verás, no lo creemos las personas que apoyamos esta causa y en el fondo de su corazón tampoco lo creen las personas que usan ese argumento. Lo saben, saben que no es cierto.

    Para muestra un botón, el mismo restaurante dice en su comunicado que celebran el amor y que han tenido el placer de celebrar bodas en su establecimiento. Sí, celebran el amor heterosexual, si es de otro tipo lo condenan. En esas bodas, esos novios ¿No se tomaron de la mano, ni se besaron durante todo el tiempo de su celebración?

    Pasa lo siguiente: La homosexualidad y la homofobia son una realidad y coexisten en el tiempo y el espacio, codo a codo, cotidianamente. Las personas homosexuales (no todos) se asumen como tal a sabiendas de que eso los pone en evidencia, en el spotlight por el sólo de hecho de asumirse se exponen al señalamiento, el escudriño, al prejuicio y viven con ese estigma todos los días de su vida.

    La homofobia se ha convertido en un término tan políticamente incorrecto que ningún homofobico se asume como tal, ni uno solo. Sin embargo, no se abstienen de tomar acción y/o palabra en menor o mayor medida. Vamos! su sólo discurso los delata.

    Los invito, a todos los homofobicos de closet, a tener la osadía y el valor de ponerse también en evidencia. Salir del closet de la homofobia y decir, si soy homofobico. ¿Qué tiene hombre?!! no va pasar nada. A partir de este punto podríamos crear un dialogo mucho más honesto y directo, sin andarnos por las ramas.

    Respondiendo a tu pregunta (aunque también es retórica), sí sería discriminación hacerle lo mismo a una pareja heterosexual, hay me avisas si alguuuuna vez, escuchas sobre un caso.

    Gracias por tu participación. Buen día.

  6. Que porquería de disculpa ( de parte de santos grill).
    Muy hermosa carta y felicidades, espero de alguna u otra forma las personas aprendan que no existe linea que nos divida.

  7. Es curioso, como en otras publicaciones en Facebook he podido leer tantos y tantos comentarios de apoyo hacia el establecimiento. Casualmente, son escritos en publicaciones donde falta la argumentación bien hilada, con bases sólidas y con redacción impecable como es el caso de esta carta abierta (mis respetos). ¿Porqué? Por que sencillamente las personas que apoyan las ideologías y la acción del establecimiento carecen de argumentos fuertes para polemizar y refutar una carta como la que aquí acabo de leer. Simplemente porque saben de sobra que alguien de manera paciente, informada y diplomática les va a decir «cuánto son 5» y lógicamente van a salir molestos, por la cuestión de que no, no van a mover la balanza de su lado, no al menos con quien lee a conciencia todo y expresa su opinión de la mejor manera posible. Concuerdo con que la «disculpa» del local parece casi todo menos disculpa, vamos ¿porque decir que celebran el amor? Aparentemente solo el que les parezca (que igual son libres) pero oiga,
    ¿y la coherencia apá? ¿porque mencionar lo de «subido de tono»? Me estás diciendo celebro el amor pero chance mi mamá diga que siempre no ¿donde queda todo? Y bien dice la autora que una disculpa es reconocer el error y enmendar, lo cual no se ve en la súper disculpa emitida por el establecimiento, sino más bien, se leen excusas que parecen redactadas por alguien que pensó: «ni pedo, con ésto se les pasa». Claro, todo pasa, y bien las damas pudieron dejarlo ahí a sabiendas de que visibilizar el caso traería la consecuencia de más burla y críticas de una sociedad que está en el siglo pasado, decidieron ir más adelante y no por berrinche, porque consideran necesario hacer ver estas cosas que pasan que no son una o dos veces pueden ser muchas y no lo sabemos porque chance se guardan. Las cosas se hacen como procede ante las instancias necesarias para que la gente se dé cuenta de la realidad, que poco a poco se atrevan a opinar, que vamos, compartan algo pero de otro modo que no sea esgrimiendo viejos argumentos e incluso ofensas que he llegado a leer. Porque es necesario hablar, explicarse y hacerlo bien. De nuevo, mis respetos a la autora de la carta y se agradece leer ésto en Crónica Sonora.

    1. A mi también me da gusto escuchar voces empáticas como la tuya, que comprenden la problemática más integralmente y no tan superficial como el vox populi de la comunidad «feisbuquera». Gracias por tu participación. Saludos

  8. ¡Lo más increíble es que Santo’s Grill se victimiza en sus disculpas!
    Esto nos demuestra que vivimos en un ranchote. Todos los que creen vivir en una gran urbe, que se presumen de citadinos dignos de las grandes ciudades y nos cuentan de CDMX, NY, LA, etc. todos aquellos faroles que pululan por Sonora están todos sentados comiendo en Santos Grill aplaudiendo a quienes escribieron esta disculpa, creyendo en que verdaderamente no tuvieron otra opción y que su acto no fue descriminación si no compromiso con la sociedad, ellos quienes están muy al pendiente de lo que sus comensales pueden tolerar.
    No puedo decir que soy activista o que estoy en la lucha constante por los derechos de la comunidad, pero eso no impide que pueda darme cuenta de las injusticias, por favor, el cambio ya se dio, la mentalidad social ya evolucionó, no tenemos que esperar nada, ustedes son los únicos que no se han dado cuenta.

    Excelente texto, felicidades a la autora, que bien que existan personas con esta crítica tan ilumninada, libre y sin pelos en la lengua como decimos por acá en esta tierra de estrechez mental y mucho calor.

  9. Me llaman mucho la atención los adjetivos «provinciana», «mocha» que han sido señalados aquí para hacer referencia a esta sociedad, también elogiada como una sociedad «del siglo pasado». Les comento que estoy de acuerdo con dichos adjetivos y le añadiría uno màs: ciudad de Springfield. Hago referencia a los Simpsons ya que casi llegado a mi tercera década de vida y también de habitar en estas tierras me he dado cuenta y percibido cuan parecidos somos a esa caricatura. Una sociedad tan moralista, orgullosa de su ignorancia, un rebaño de ovejas que al primer chasquido de dedos caminan hacia donde los quieren llevar la iglesia y la clase política tan sarra como la de aquí. No les parece? En serio, cada vez me sorprenden más las similitudes, pero sobre todo como es que llevan a discusión temas tan irrelevantes como este.. igualito como en la serie de tv ?. Ni mi comentario ni mi apoyo es a favor de las chicas homosexuales, ni del changarro ese, es más bien el de criticar-nos como sociedad. Enserio creen que este tema tenga alguna relevancia? Hay muchos problemas diarios en este cada vez caótico rancho-ciudad y se van a empeorar porque está creciendo endemoniadamente y nadie dice nada … Claro es más fácil defender homosexuales y perros de la calle que ver el problema de los drogadictos e indígentes o repatradios, las pendejadas y raterias de politicos. Defender a los primeros es mainstream es lo de hoy, lo actual. P.osdataS
    . como siguen moviendo a la raza las palabras niños, discriminación, homofobia en un discurso.. son algunas de las muchas representaciones de el «chasquido de dedos» del que les hablaba arriba

    1. Yo también pensé en Los Simpsons con este tema, por aquello de «Alguien por favor quiere pensar en los niños». Es una verdadera lástima que ya no sean tan buenos como antes. Te recomiendo los de la primera década.

      No podría estar más de acuerdo en que es mucho más fácil ser tolerantes e incluyentes que resolver las problemáticas sociales que nos generan la corrupción y la pobreza. Pero siendo así, ¿porqué es hora de que no ocurre? El único motivo por el que es un tema polémico es porque sigue tocando sensibilidades, ¿Qué más vigente que eso se puede ser? ¿Quiere decir que no haber logrado los objetivos de esta causa ya es motivo para dar vuelta a la página y decir «bueno pues, ni modo, no se pudo»?

      Qué si el tema tiene relevancia preguntas. Me temo que si y nadie quisiera más que los afectados que no la tuviera. Claro que, como no te afecta a ti no entiendes la importancia ni los alcances, pero te invito a reflexionar sobre esa actitud de indiferencia e indolencia porque una sociedad indiferente e indolente es la causante de muchos de los problemas sociales, incluidos los que mencionas. Abandera la causa que tú decidas, pero abandera una. (Ojo! demeritar las causas ajenas no es abanderar una causa)

      Que no te perjudique directamente a ti o que tú consideres que es viable catalogar las problemáticas sociales y asignarles un valor por orden de «importancia», según tus propios parámetros, pues sólo demuestra que se te escapan las implicaciones del no respeto a los derechos humanos y la discriminación, que son problemáticas vigentes, visibles y SI, importantes.

      Esa actitud de darle atención sólo a aquello que si me afecta y si me perjudica pero al mismo tiempo sin hacer nada al respecto; denostar las causas ajenas diciendo que son mainstream y/o que están superadas, que no son relevantes y creer que una causa resta importancia a otra son características de lo que llamamos activismo de escritorio, muy difundido hoy en día por el uso de las redes sociales. A esto sólo puedo decir «mucho ayuda el que no estorba», dicho popular que no creo que necesite mayor explicación.

      Para terminar, una cita:
      «Cuando los nazis vinieron a buscar a los comunistas,
      guardé silencio,
      porque yo no era comunista.
      Cuando encarcelaron a los socialdemócratas,
      guardé silencio,
      porque yo no era socialdemócrata.
      Cuando vinieron a buscar a los sindicalistas,
      no protesté,
      porque yo no era sindicalista.
      Cuando vinieron a por los judíos,
      no pronuncié palabra,
      porque yo no era judío.
      Cuando finalmente vinieron a por mí,
      no había nadie más que pudiera protestar»

      Martin Niemoeller
      (Erróneamente atribuida a Bertolt Brecht)
      Fuente: Wikipedia of course

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