Reporteros, bailarines, bebidas y filarmónicas ?

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Es bien sabido que este 2017 Antares celebró sus 30 años de trabajo ininterrumpido. Bueno, celebra, porque la fiesta no ha terminado. Hoy jueves y mañana viernes 17 de noviembre la compañía presenta Disecciones, compartiendo escenario con la mismísima filarmónica del estado. Es decir, un espectáculo sin precedentes con todo y que somos la capital de la danza contemporánea del país.

Isaac Chau, uno de sus intérpretes más logrados y también responsable del área de comunicación -total, para eso estudió- se acercó a Crónica Sonora por la vía digital y finalmente amarramos los cochis en el mundo de los cuerpos, el presencial, al calor de unos martinis de fresa y de guayaba que el lunes obsequiaron en otro evento cultural.

-Mira, ahí está Miguel, quién mejor para hablar de esta presentación de aniversario

-Ah sí, además es mi coterráneo, recién lo descubrí

-Pues agárralo

Miguel Mancillas, director de Antares, vivió en Villa Juárez cuando niño. Igual que el reportero. Al abordarlo me confesé.

-¿Qué tal, Miguel? Yo también soy de Villa Juárez

-Todos tenemos antecedentes penales

Rompí en risas pero luego me quedé pensando bien a bien, ¿a qué se referirá?. Se me vino a la mente algún personaje y otro más, pero ya no dije nada. Acordamos la entrevista para el día siguiente.

-Miguel, ¿por qué cerrar las actividades por el treinta aniversario con Disecciones? Supongo hay una relación directa con la música, es decir con el acompañamiento de la filarmónica del estado.

-En realidad, después de Disecciones estaremos en CDMX con Que no descubran tu nombre (2012) y regresamos para cerrar el año con CRUOR. Yo hice la broma en algunas entrevistas de que prevenía que la celebración iba a ser de dos años. El 2018 estamos con otros remontajes, Vestigio (1996) y LADOALADO (2009), e intentaremos estrenar un nuevo proyecto para fin de año. Como verás, nos hemos tomado en serio esto de festejar los treinta. Lo que resulta significativo es lograr esta colaboración con la Orquesta Filarmónica de Sonora (y espero sea la primera de varias). No es fácil compaginar agendas y resolver las circunstancias técnicas que surgen. Ahora espero que el público respalde acciones así, para que sigan sucediendo.

-Hablando de público, ha poco platicábamos entre copas de la relevancia que tiene para el intérprete la presencia o ausencia del respetable. Comparte, Miguel, esa reflexión con los lectores de Crónica Sonora, muchos de ellos asiduos a la danza contemporánea.

-La apreciación de cualquier suceso es condicionado por el entorno, es algo que el creador tiene que considerar. La cercanía o no del espectador altera la recepción de la danza. El acto íntimo o masivo provoca reacciones únicas. Anímicamente nos afectamos por lo que sucede en el foro e igualmente entre los espectadores. Podemos sacar la conclusión de que algo no estuvo bien nomás por tener un niño llorando cerca, o salir emocionados porque la audiencia se armonizó para apreciar la obra (música, danza, teatro).
-Última. Quizá no te competa pero quizá sí. Más allá del espectáculo sin precedentes, el precio de las entradas, doscientos pesos mexicanos, ¿no resulta elevado para el espectador acostumbrado a pagar cien, cincuenta o nada?

No lo sé… Siempre dudamos, pero en eventos de ballet se llega a pagar 600 y en los de corte masivo hasta 10,000. No meteré aquí lo que se gasta en la Expo(Gan), pero supongo que tendrá que ver con cultura, costumbres y valoraciones. Decidimos los 200 por la cantidad de gente involucrada. Ahora que, pues sí, esperamos se comprenda lo que implica la producción artística.

Buena bola. Si queremos espectáculos de primer mundo -yo sí quiero-, necesitamos un público de primer mundo.

Con la prensa no se metan, a esa le encanta el tercero.

Por Benjamín Alonso

En portada, imagen de Disecciones por Ricardo León

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Sobre el autor

Premio Nacional de Periodismo 2007. Director de Crónica Sonora. Escríbele a cronicasonora@gmail.com

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